Como les habíamos dicho con anterioridad nuestras madres nos cocinan solo ocasionalmente. Por eso debemos recurrir a la tan aliada y útil salida de compras, al mercadito chino de a la vuelta, con todo lo que esto incluye.
Esto nos recuerda las múltiples connotaciones que la palabra chino puede tener...esta es la mejor!!
Volviendo a lo nuestro al ingresar al mercado se nos ocurrió pasar por la sección de fiambres y comprar un salamín . A todo esto, a la vendedora se le ocurre formular una pregunta muy compleja"¿Quieren salamìn picado grueso o picado fino?" a lo que luego de mirarnos extrañadas respondimos "Lo llevamos entero". Esto es una prueba mas del pobre conocimiento que poseemos de este vasto mundo de "ser amas de casa"!
Situaciones como estas nos llevan al peligroso pero no menos atractivo, mundo de las comidas rápidas.
Uno de esos días en los cuales nuestras madres no se dignaron a cocinarnos, ni nosotras a cometer tan terrible acto, nos dirigimos hacia el tan conocido y frecuentado Mc. Donalds.
Luego de haber comido decidimos retirarnos con la elegancia que nos caracteriza. Al bajar la escalera tuvimos un traspié que nos llevo a casi caer de la misma cuando un caballero de plateada armadura nos auxilio tomándonos entre sus brazos.Como se imaginaran este hombre no era precisamente un galán pero evitó que termináramos en un hospital y nos perdiéramos los halagos de la mesa de jubilados que se encontraba bajando la escalera.
